Editorial: Debolsillo
Páginas: 672
Precio: 19,95€
Género: Cómic
Sinopsis:Tercer volumen de Pies descalzos, una serie que no llega únicamente a los amantes del cómic, es una historia universal. Keiji Nakazawa nos emociona y nos remueve por dentro.A pesar de que las consecuencias de la bomba atómica siguen siendo extremadamente duras, Gen y sus amigos luchan para rehacer sus vidas.Desde que estalló la bomba atómica, hace casi tres años, Gen no había sentido esperanza. Pero quizá es posible que vuelva a ser feliz a pesar de todo. Además de a su familia, tiene a un grupo de amigos con planes para el futuro.
No obstante, el desastre de la bomba sigue atormentando a los supervivientes. Entre ellos se encuentra el señor Hirayama, quien antes de conocer a Gen y a su variopinta pandilla estaba convencido de que solo le quedaba esperar la muerte. Acogido como un nuevo padre, recobra las fuerzas para escribir una dura crónica sobre Japón. En ella cuenta el verdadero horror de los hechos acaecidos en Hiroshima. Su voz es la de todas las víctimas... Pero en 1948, bajo ocupación estadounidense y con la refundación del estado japonés todavía a medias, está prohibido hablar de ello.
Mi opinión
Tercera de las cuatro partes que forman esta historia sobre el bombardeo de Hiroshima. Esta parte me ha gustado más que su antecesora. El autor vuelve de nuevo a relatar y a centrase en los acontecimientos históricos y deja de lado las andanzas pueriles que rodean a Gen.
Gen es un personaje que me encanta. Tras lo vivido con la bomba atómica madura de golpe y comprende de un plumazo que la vida es dura e injusta en la mayoría de aspectos esenciales.
Desde el primer tomo, se relaciona con Ryuta, un niño que le recuerda a su hermano y, si bien es cierto que sus andanzas juntos me entretenían en los dos primeros tomos, en esta ocasión cada aparición de Ryuta me molestaba y me sacaba de la historia completamente.
A lo largo de los tres tomos, Gen evoluciona de una manera brillante y, aunque sigue haciendo cosas de preadolescentes, están bien integradas en la trama. Sin embargo, en el caso de Ryuta, sigue comportándose de una manera muy infantil y se ríe de absolutamente todo en la mayoría de sus viñetas, dándome la sensación de que muchas de ellas están metidas con calzador en la historia y que el autor las utiliza para quitar hierro al asunto, pero no me ha convencido cómo está hecho.
Me sigue encantando la manera de narrar la historia, la imparcialidad del autor castigando a ambos bandos y lo increíblemente bien que muestra las penurias, barbaridades e injusticias que tuvieron que soportar los Japoneses, no sólo con el lanzamiento de la bomba, sino los años posteriores, ya que Estados Unidos siguió aprovechándose de ellos de una manera asquerosa y repugnante.
Ya sólo me falta un tomo para acabar toda la historia y, por ahora, no puedo hacer más que recomendároslo; es una lectura fácil y muy interesante.
PUNTUACIÓN: 9/10
Los tomos anteriores son (pincha en la imagen para acceder a la reseña)
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